Pletina laminado: Usos y tipos
El laminado es un proceso muy utilizado para conseguir que el metal sea más dúctil y manejable. Hay dos maneras de conseguir el laminado del acero, en frío y en caliente. Ambos utilizan un calor bastante elevado, pero el laminado en frío tiene un paso más en el proceso que le aporta un extra en su conformación.
El laminado comienza con lingotes de acero, que se someten a temperaturas muy altas, que funden el metal y permiten que se estire y se consiga una lámina uniforme. Esto se consigue pasando el metal fundido por varios cilindros a presión. Este sistema se llama tren de laminación.
Este proceso permite que el laminado tenga la longitud y la anchura que se busca para crear la lámina.
Pero en este caso, la lámina no se puede utilizar para crear productos de acero para su uso inmediato, ya que no tiene tolerancias ajustadas. Por este motivo, las láminas de acero necesitan pasar por otros productos de mecanizado para conseguir la tolerancia que se precisa para cada función a la que se va a dedicar el producto final.
Laminado en caliente
El laminado en caliente se consigue con el proceso de conformación con una temperatura que supera los 926ºC. De esta manera se evita su recristalización y se evita que pueda sufrir roturas, tal y como sucede con el acero frío.
Es un proceso que permite reducir los costes de laminación del acero, aunque cuando este se enfría, se puede perder algo de tamaño por la contracción del metal y su forma puede variar un poco respecto a la que se puede conseguir con el laminado en frío.
Con el laminado en caliente se consiguen materiales que pueden ser más prácticos para ser soldados y requieran una gran resistencia. Por ejemplo, se puede usar para la fabricación de rieles para las vías de tren.
Laminado en frío
El laminado en frío permite que el proceso de conformado se realice a temperatura ambiente. Esto evita que la forma y el tamaño del material cambie con la temperatura que se produce en el laminado en caliente.
Sin embargo, esto puede causar una rotura cuando se está manipulando, así que después de realizar el conformado, se debe pasar por un proceso que recibe el nombre de recocido. El laminado en frío incrementa la resistencia y la dureza del acero, pero reduce su ductilidad. Es decir, la capacidad de moldearse sin romperse.
El uso de los productos conseguidos con el laminado en frío son adecuados para proyectos de construcción que requieran en su estructura materiales con tolerancia y formas concretas, resistentes y con balance céntrico correcto.
Propiedades mecánicas del laminado
Las propiedades mecánicas de las pletinas laminadas pueden variar mucho dependiendo del material utilizado y su composición química. Estas propiedades son las siguientes: elasticidad, ductilidad, forjabilidad, maleabilidad, tenacidad, soldabilidad, conductibilidad, oxidación y dureza.
Según las condiciones y la calidad del material utilizado, estas serán diferentes. Cada uso requiere que tenga propiedades distintas, así que es importante elegir bien el tipo de metal utilizado para realizar las piezas de laminado.
Ángulos estructurales L: Este tipo de acero laminado ofrece una armonía simétrica y que conserve su balance.
Tipo de aceros laminados
Los tipos de acero laminado son muy variados y las piezas que se obtienen de este proceso son muy específicas y tienen un fin muy concreto. Estos son alguno de los productos realizados mediante la laminación de metal y sus usos más comunes:
- Canales U: Este tipo se produce mediante laminación en caliente. Este acero laminado se utiliza sobre todo para estructuras como vigas, viguetas, carrocerías o cerchas.
- Perfiles T: También se elabora con láminas en caliente. Se utiliza sobre todo para construcciones civiles, como torres metálicas y en carpintería metálica.
- Pletinas: Este producto de sección regular también se produce con laminado en caliente. Se utiliza para fabricar ventanas, puertas, rejas y piezas forjadas.
- Barras cuadradas: Este producto se lamina en caliente y se utiliza para fabricar puertas, ventanas, rejas y otras estructuras metálicas similares.
- Barras hexagonales: A partir de la laminación de acero en caliente, se crean estas láminas de sección hexagonal y superficie lisa. Se suele usar para elementos de ensamblaje, pernos, ejes, tuercas, pines y herramientas simples como barras, cinceles y barrenas, entre otros.
- Perfiles por soldadura: Son elementos que se ensamblan con estructuras de forma rectangular. Estas estructuras se fabrican mediante la soldadura con ellas y se pueden fabricar a medida del lugar donde se deben colocar.
- Chapa: Este producto es un laminado de acero que se fabrica y se almacena en bobinas como una capa de distintos grosores. Esta chapa se puede utilizar en calderería, pero también en la industria de la automoción, además de en otros usos específicos, si se añaden otros materiales.
- Acero corrugado: Este acero puede provenir del reciclaje de chatarra, que se puede fundir y utilizar para fabricar este tipo de acero. Su uso se centra en la fabricación de estructuras de hormigón armado y cimentaciones.
Estos materiales laminados son la base de muchas de las construcciones que se pueden ver en todo el mundo. Aunque muchas veces pasan desapercibidos, ya que quedan cubiertos por otros elementos. Pero sin ellos, no sería posible realizar muchos de esos proyectos que cuentan con materiales de alta calidad.
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